Salmos 34:18. Cercano está el Señor a los quebrantados de corazón, y salva a los contritos de espíritu."
Este versículo nos recuerda la tierna compasión de Dios hacia quienes atraviesan momentos de dolor y desesperanza. Él no está lejos ni indiferente; por el contrario, se acerca con amor a aquellos que están quebrantados y humildes. Es un llamado a confiar en que, en nuestras mayores aflicciones, Su presencia nos sostiene y Su salvación nos restaura.