Mateo 11:28. "Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar."
Este versículo es una invitación llena de amor y esperanza. Jesús no promete una vida sin problemas, pero sí ofrece descanso para el alma cansada. En medio del estrés, las preocupaciones y las cargas que nos agobian, Él nos llama a acercarnos. No es un llamado a una religión fría, sino a una relación personal con Aquel que tiene el poder de renovar nuestras fuerzas.
Descansar en Cristo es soltar el control, confiar en Su gracia y creer que Su yugo es ligero. Hoy, si sientes peso en tu corazón, escucha Su voz: acércate a Jesús, porque solo en Él encontrarás la paz que tanto anhelas.
