Pero hay un Dios en los cielos, el cual revela los misterios, y él ha hecho saber al rey Nabucodonosor lo que ha de acontecer en los postreros días. Daniel 2:28.
Que se desate sobre tu cabeza un aceite fresco que provoque cambios en tu forma de pensar y de vivir. Declaro nuevas experiencias, nuevas revelaciones y una frescura en tu relación con Dios. Vas a ver lo que no podías percibir, vas a entender lo que no podías comprender. En el nombre de Jesús!
